¡Hola a todos! Ya entramos en la recta final del año. Para compensar todas las comidas copiosas de estos días, hoy os traigo una receta ligera: sopa de almendras vegana. Me gusta mucho esta sopa. En primer lugar porqué lleva almendras (obvio, me encantan las almendras) y también porqué es una sopa que queda cremosa sin necesidad de añadirle nata, lo que le da ligereza al plato.Ya veréis que es una sopa vegana muy rápida de preparar y que con muy pocos ingredientes conseguiréis hacer una plato cálido y cremoso.
Se trata de un entrante que sienta de maravilla, especialmente durante los días fríos. De hecho, si os toca cocinar para la noche de fin de año, esta sopa os puede servir como entrante vegano. Y si las almendras no os apasionan siempre podéis recurrir a la crema de castañas…
¿Por cierto, cómo pasasteis la nochebuena? Para nosotros fue un día muy feliz. Lo pasamos en casa, descansando y cenando una pizza vegana casera repleta de verduras (pimiento asado, champiñones, alcachofa…) una delicia que pronto os enseñaré a preparar. Estuvimos viendo la peli de Everest (que por cierto no nos gustó demasiado…).
Al día siguiente salimos a correr un poco para compensar las comilonas presentes y futuras. La idea era salir a correr un ratito por nuestro circuito de siempre, pero se nos fue de las manos y al final estuvimos más de una hora corriendo por Montjuic. Me vino muy bien cambiar de aires, ver un poco de verde y que nos tocase un poco el sol.
Después de entrenar subimos a casa de mis padres para comer y celebrar el día de Navidad en familia. Mi madre se curró una ensalada de lentejas y un postre crudivegano la mar de original: bolitas de cacao, coco, zanahoria y calabacín. Estaban de muerte, y muy sanas. Un día de estos le robo la receta y os la enseño. 🙂
Mañana estad muy atentos al blog porqué publicaré la última receta del año, y va a ser una receta muy especial. ¡Tengo muchas ganas de compartirla con vosotros! De momento, disfrutad de la sopa de almendras vegana y empezad a pensar en los propósitos de año nuevo, que ya no queda nada…
- 1 litro caldo de verduras
- 200 gr de almendra cruda molida
- 200 gr. de puerro (parte blanca)
- 1 diente de ajo
- 30 gr aceite
- Sal
- Pimienta
- Nuez moscada
- Almedra laminada o en palitos para decorar.
- Limpiamos el puerro y lo cortamos a rodajas, y picamos el diente de ajo.
- Calentamos una olla grande. Cuando esté caliente, añadimos el aceite y sofreímos el puerro con el ajo a fuego medio y removiendo constantemente para evitar que las verduras se quemen.
- Cuando el puerro y el ajo estén dorados, añadimos el caldo y la almendra cruda. Tapamos y dejamos hervir durante unos 10 minutos.
- Pasados los 10 minutos, retiramos la olla del fuego. Añadimos la sal, la pimienta y la nuez moscada al gusto y trituramos.
- Tostamos un poco de almendra laminada o en palitos en una sartén.
- Servimos la sopa caliente con las almendras tostadas por encima.
Xenia Vega
Hola!! La voy a preparar !! Parece exquisita.
Acabo de encontrar tu blog ….y estamos en 2019……vivo en la Isla de Puerto Rico
Leska
hola las almendras se pelan o las usamos como en la foto? gracias
Cris
Hola Leska,
Las almendras de la foto son tostadas y llevan la piel. Para hacer la crema, utiliza almendra cruda sin piel. 🙂