Tortilla de patatas vegana

¿Os gustaría aprender a hacer la mejor tortilla de patatas vegana del mundo mundial? Aprender a hacer una buena tortilla es algo a lo que aspira todo cocinillas, ¡y es que la tortilla perfecta guarda sus trucos! Y especialmente, cuando preparamos la versión vegana, hay algunas cosas importantes a tener en cuenta.

A todo el mundo le gusta disfrutar de una buena tortilla de patatas, ya sea en un pincho, como aperitivo, para comer con una ensalada o para picotear en una fiesta. A mi, como más me gusta, definitivamente es con pan de coca, aceite y tomate. ¿Por qué no hacer entonces este mítico plato en su versión vegana? Además de ser una alternativa animal friendly, es apta para todas aquellas personas alérgicas al huevo. Y si eres celíaco o alérgico al gluten, no te preocupes, aquí tienes una versión de tortilla vegana sin gluten, para la cual no utilizo cerveza (ya sé que es bastante difícil encontrar cervezas sin gluten, y eso es una autentica lástima).

La primera vez que probé una tortilla de patatas vegana fue hace ya unos cuantos años en un cursillo de cocina. Para sustituir el huevo utilizamos harina de garbanzos, agua y un poco de fécula de yuca, y debo deciros que el resultado fue espectacular. Nos quedó una tortilla de patatas bien sabrosa y, pese a lo que pudiera parecer, el sabor a garbanzo era prácticamente nulo. Desde entonces, para hacer la tortilla de patatas he seguido siempre la misma receta pero, tras investigar un poco, os presento una versión mejorada.

Antes de dar paso a la receta, analizaremos un poco los ingredientes de la tortilla por separado. Por un lado, tenemos las patatas y la cebolla. Personalmente creo que la cebolla es un ingrediente totalmente imprescindible porqué aporta sabor y jugosidad a la tortilla. Por otro lado, tenemos los ingredientes que conforman el sustituto del huevo:

Sí, estáis leyendo bien ¡cerveza! ¿El resultado? La tortilla tiene muchísimo sabor y aroma, es sencillamente increíble. Igual que si se tratase de un bizcocho o un pastel, mezclamos la harina con el líquido para que luego cuaje con el calor en la sartén.

Utilizamos la harina de garbanzo por su color amarillo pálido y por ser una fuente de proteína. De esta manera, podemos hacer una elaboración algo más completa a nivel nutricional, aunque no debemos olvidar que se trata de un plato calórico y alto en grasas, por lo que conviene consumirlo de forma eventual. Aunque la tortilla queda muy conseguida en cuanto a sabor y aspecto, la harina de garbanzo la hace más densa que si estuviera hecha con huevo.

Precisamente para contrarrestar la densidad de la harina de garbanzo, utilizamos la fécula de yuca (o harina de mandioca) y una buena cantidad de líquido (agua y cerveza, en este caso). La fécula es una sustancia blanca que se extrae de tubérculos, como la patata o la yuca. Se caracteriza por formar un engrudo con el agua caliente y se utiliza en la cocina como espesante gracias al efecto del almidón. Según el origen de la fécula o almidón, tendremos un engrudo más o menos espeso. En el caso de la yuca, no es demasiado espeso, lo que nos viene genial para hacer nuestra tortilla.

Y sí, para hacer la mejor tortilla de patatas veganas he utilizado cerveza y el resultado es impresionante. La tortilla ha quedado esponjosa, con mucho aroma y sabor, realzando el gusto de la cebolla. La típica cerveza rubia que encontráis en cualquier supermercado vale para hacer esta receta. Si os gusta mucho la cerveza, podéis sustituir todo el agua de la receta por más cerveza, pero para probar la primera vez (o si la hacéis para más personas), os recomiendo seguir las medidas que os indico en la receta.

Ahora que ya os he explicado los ingredientes, me queda por desvelaros un último secreto detrás de toda buena tortilla… ¡la sartén! Porque una tortilla bonita es mejor que una tortilla que solo sabe bien. Se debe utilizar una sartén antiadeherente y que esté en buenas condiciones, es decir, que no esté rayada ni con el teflón desprendido. Además, antes de cocinar la tortilla tenemos que engrasar la sartén (una vez caliente) con un poco de aceite.

A pesar del buen resultado con la tortilla de patatas vegana, no aguanta muy bien el paso de las horas y se apelmaza, por lo que recomiendo consumirla lo antes posible. Por otro lado, recordad que al usar legumbre como base, la tortilla es mucho más densa y sacia antes. Una tortilla de 20 cm. es suficiente para 4 personas.

Las claves para la tortilla de patatas vegana perfecta

En resumen, creo que los terucos para conseguir una buena tortilla de patatas sin huevo son los siguientes:

Creo que si seguís estos consejos os saldrá una tortilla de patatas sin huevo espectacular.

Si finalmente os animáis a seguir mi receta, no dudéis en contármelo a través de un comentario aquí, en el blog, o a través de redes sociales. !Me encantará saber cómo os ha ido!

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Tortilla de patatas vegana

 

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Autor: Delantal de Alces

Cantidad: 4 personas

Ingredientes

Para una tortilla de 20 cm.

• 100 g de harina de garbanzo
• 175 ml de cerveza
• 75 ml de agua
• 20 g de fécula de yuca
• 4 patatas
• 1 cebolla
• Aceite de oliva para freír
• Sal

Preparación

1. Pela y corta las patatas en rodajas finas y reserva.
2. Pon a calentar una sartén con aceite. Cuando el aceite esté caliente, fríe las patatas. Puedes hacer este paso por tandas si la sartén en pequeña.
3. Mientras fríes la patata, pela la cebolla, córtala por la mitad y luego en juliana (a tiras).
4. Cuando hayas freído la patata, fríe la cebolla.
5. Coloca la patata y la cebolla frita en un colador para que suelte el aceite sobrante, añade sal y mezcla.
6. En en vaso de la batidora, añade la harina de garbanzo, la fécula de yuca, una picza de sal, el agua y la cerveza. Bate hasta que estén los ingredientes bien mezclados.
7. En un bol, vierte la mezcla sobre las patatas y la cebolla y remueve ligeramente con un tenedor.
8. Pon a calentar la sartén donde harás la tortilla. Cuando esté caliente, pinta con un poco de aceite (incluidos los bordes).
9. añade a la sartén la mezcla de la tortilla que tienes en el bol y chafa un poco para que se reparta bien. Sube el fuego durante un minuto para que la base se tueste. Después baja el fuego y deja que la tortilla se cocine tapada durante 5 minutos. Pasado ese tiempo, da la vuelta a la tortilla, sube el fuego durante un minuto y medio y deja cocer tapada a fuego bajo durante 3-5 minutos más.
10. Cuando este hecha, saca la tortilla de la sartén y sirve al momento.

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