¡Hola a todos! Hoy os propongo una receta altamente adictiva: las empanadillas de calabaza y frijoles. Las he hecho con pasta brick comprada en el supermercado de al lado de casa y que no contenía ingredientes animales. Estas empanadillas están buenas tanto calientes como ya templadas, y con su sabor cálido y aromático son ideales para las comidas de otoño. Pero antes dejadme que os explique el porqué he estado algo desconectada estos días…
Esta semana pasada nos hemos tomado unas minivacaciones en Barcelona con mi cuñada, que ha venido de visita. Hemos disfrutado mucho de la ciudad y hemos aprovechado también para pasar un fin de semana por el Pirineo. Salimos el sábado por la mañana y pusimos rumbo al pantano de Corçà, en Lleida. Al llegar nos quedamos alucinados con el color turquesa del agua.
Allí hicimos un pequeño picninc y luego nos subimos a los kayaks para hacer una excursión por el Congost del Mont-Rebei. ¡Fue impresionante pasar con el kayak por el desfiladero! La excursión era ida y vuelta por el mismo sitio y, aunque fue precioso, hacia el final se nos hizo un poco duro… y es que estuvimos remando sin parar más de 3 horas. La próxima vez nos lo tomaremos con más calma o haremos la ida en kayak y la vuelta a pie por el lateral de la montaña. Pasamos la noche en Pont de Suert y al día siguiente nos dirigimos a Boí. Dimos un pequeño paseo por el pueblo y volvimos a coger el coche para subir hasta el emblase de Cavallers en el Parque Nacional de Aigüestortes. Nuestra idea era hacer una excursión de hora y media, pero nos absorvía tanto el paisaje que no podíamos dejar de hacer fotos! Total, que no hicimos ni un cuarto del recorrido. 😛
Y ahora sí, la receta de empanadillas de calabaza y frijoles:
- 750 gr. de calabaza
- 250 gr. de frijoles cocidos
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 2 pimientas de cayena
- 30 ml. de zumo de limón
- 30 ml. de agua
- Cilantro fresco (al gusto)
- Comino picado (al gusto)
- Sal
- 1 paquete de masa brick (mirad que sea vegana)
- El primer paso para preparar nuestras empanadillas será asar la calabaza (sin pepitas) en el horno a 200º. El tiempo de cocción dependerá del tamaño de la calabaza. Estará lista cuando se pueda pinchar fácilmente con un cuchillo. Os recomiendo comprar una calabaza pelada para que sea más cómodo cortarla a trozos antes de asarla y reducir así el tiempo de cocción. Si no encontráis calabaza pelada, ¡que no cunda el pánico! Le retiraremos la piel cuando ya esté asada. Cuando tengamos la calabaza asada, la cortaremos en trozos de 2 cm aproximadamente.
- Ponemos a calenar una sartén y sofreímos la cebolla. Cuando esté tierna, añadimos el ajo, el cilantro picado y la cayena picada. Saltamos durante un par de minutos, añadimos el agua y la calabaza. Dejamos cocinar la calabaza en la sartén durante 5 minutos, removiendo de vez en cuando. No pasa nada si la calabaza de rompe o se empieza a deshacer. Finalmente, añadimos los frijoles y el zumo de limón.
- Empezamos a formar las empanadillas. Extendemos la masa brick y la cortamos en cuadrados o en medias lunas (según la forma de la masa), podemos un par de cucharadas de masa, cerramos los laterales y enrollamos, formando un paquetito. Repetimos la operación hasta terminar la masa.
- Precalentamos el horno según indique el fabricante de la masa que hayamos comprado. Colocamos las empanadillas sobre papel vegetal en una bandeja de horno y las pintamos con aceite antes de cocinarlas.
Que buen bocado se ve.
Un saludito