¡He descubierto una receta de coca impresionante! Había pensado en llamarla Coca Deluxe, pero quizás sea más acertado dejarle un nombre más descriptivo: coca de berenjena y espinacas. El caso es que esta coca es una explosión de sabores y tiene una textura fina y súper crujiente que no había probado antes. Esta receta es una adaptación de un flatbread de un libro de Tal Ronnen, un chef vegano afincado en Los Ángeles. Su receta original se sirve con una salsa tahini, berenjena asada y espinacas aliñadas con una vinagreta de menta.
El libro del que os hablo se titula Crossroads, y tiene un capítulo dedicado a recetas de flatbread. Aunque lo correcto sería traducir flatbread como pan de pita o torta, creo que sería más indicado traducirlo como coca, ya que se parece más a este tipo de elaboración, muy popular en Cataluña y Baleares. Las cocas son masas tipo pan, finas, a las que se les añaden verduras, carne y o pescado. En Baleares, por ejemplo, existe la coca de trampó o en Catalunya la coca de recapte.
A diferencia de las cocas que he probado, la versión de Taal Ronen es mucho más fina, crujiente y muy poco grasa. Una vez horneada queda especialmente crujiente. Además, a la masa se le añade pimienta, lo que le da mucho sabor y mucha gracia. Hasta ahora nunca había probado una masa de este tipo con un toque picante y la verdad es que me ha encantado.
Sin duda, el toque picante de la masa combina a la perfección con la salsa dulce, preparada a base de tomate y muchas especies al más puro estilo tahini. Para rematar este festival de sabores, la espinaca fresca se aliña con vinagre de Módena y se sirve con un poquito de menta. La combinación de sabores no podría ser más acertada y con más personalidad.
Las cantidades que os he puesto en la receta sirven para hacer 4 cocas (no muy grandes, de aproximadamente 32 x 12 cm.), pero si queréis preparar menos cantidad, tan solo tenéis que congelar las porciones de masa sobrante y la salsa, y preparar menos cantidad de berenjena y espinacas. Ahora mismo, en el congelador tengo guardada masa y salsa, y ya he empezado a mover hilos para organizar un cenita en casa y sorprender a todos con esta coca de berenjena y espinacas. Además, ya tengo en mente otra versión de coca para aprovechar la masa que me sobró.
Espero que os animéis a hacer esta receta porqué estoy muy segura de que os va a enamorar. Palabra de bloguera cocinera. Y lo dicho, me pongo manos a la obra para traeros una nueva receta de coca vegana el mes próximo. 😉
¡Y no se me olvida! El martes os dejé con la incógnita de mi próximo destino. ¡Nos vamos a Tenerife a ver a nuestros grandes amigos Anna y Gabri! Lluís y yo os agradeceríamos mucho si nos podéis recomendar restaurantes veganos, (o con opciones) que haya en la isla. Muero de ganas por disfrutar de las playas de arena negra, subir al Teide y hacer excursiones por sus paisajes lunares. ¿Vosotros habéis estado? ¡Contadme qué tal fue vuestra experiencia! 🙂
- 2 berenjenas
- 150 g de espinacas frescas
- 24 hojas de menta
- 3 c.s. de aceite de oliva
- 1 c.s. de vinagre de Módena
- Sal
- Pimienta negra
- 400 g de harina de trigo
- 220 g de agua
- 10 g de sal
- 5 g de levadura fresca
- 5 g de aceite de oliva
- 5 g de azúcar integral de caña (panela)
- 5 g de pimienta blanca
- 300 ml de caldo de verdura
- 4 tomates de pera
- 1 cebolla
- 4 dientes de ajo
- 2 orejones
- ½ c.c. de canela
- ½ c.c. de jengibre
- ½ c.c. de pimentón picante
- ½ c.c. de cúrcuma
- ¼ c.c. de comino
- Empezamos preparando la masa. Diluye el azúcar y la levadura en agua tibia y mezcla en un bol con el resto de ingredientes. Cuando estén integrados, amasa sobre la encimera durante 15 minutos. Guarda la masa en un bol engrasado con aceite, tapa con papel film y dejar levar hasta que doble su tamaño.
- Calienta el horno a 220º. Corta la berenjena en tacos de medio centímetro. Mezcla con aceite y pimienta. Coloca la berenjena sobre papel vegetal en una bandeja de horno y asa durante 45 minutos. Remueve a media cocción para que la berenjena no se queme.
- Prepara la salsa. Corta los tomates en cuartos y quítales el pedúnculo y la pulpa. Corta la cebolla en juliana y sofríela en un cazo con un poco de aceite. Cuando se empiece a dorar, añade el ajo cortado en láminas y sofríe durante 2 minutos más. Añade el resto de ingredientes y deja cocinar a fuego medio durante 45 minutos.
- Cuando haya pasado el tiempo de cocción. Retira el cazo del fuego y tritura hasta obtener una salsa sin grumos. Debe quedar una textura parecida a una salsa de tomate. Si está demasiado espesa, rectifica añadiendo un poco más de caldo y tritura de nuevo para que se mezcle bien.
- Calienta el horno a 230º.
- Saca con cuidado la masa del bol y córtala en 4 trozos iguales. Si no quieres hacer 4 cocas, puedes congelar los trozos que no vayas a utilizar.
- Estira la masa hasta que tenga 5 mm de grosor. Píntala con aceite de oliva. Pon encima un poco de salsa, dejando un margen de 1 cm., y berenjena asada. Hornea durante 20 minutos o hasta que la coca se dore.
- Mientras se hornea la coca, mezcla las hojas de espinaca con el vinagre de Módena.
- Una vez la coca esté dorada, puedes sacarla de horno. Cuando se enfríe, cubre con las espinacas y unas hojas de menta y ya estará lista para servir.
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